viernes, 5 de junio de 2009

Brindis por el tiempo que nos hace y que nos deshace

Sal a la ventana
y levanta tu copa
como una ofrenda al sol
pintor del aire transparente
de la tarde que se aleja,
que destella
como el vino,
como el oro
derramado....
Y bébete de un solo
trago tanto color,
o a sorbos, tenuemente,
y el regusto de la vida...
su dolor y sus caricias.

Llegue de pronto,
casi una sorpresa,
la noche
con su terciopelo azul
de luminosos silencios...
la jornada ha terminado.

Caiga, pues, el telón,
la tragicomedia, tal vez,
queda ya concluida.

Canto